sábado, 1 de septiembre de 2012

ACOSO EN LAS REDES SOCIALES


Acosadores cibernéticos: tenga mucho cuidado con los obsesivos "stalkers"

Contacto no deseado. Convertirse en un
Contacto no deseado. Convertirse en un "stalker" parece cuestión de juego, sin embargo denota baja autoestima y valoración de la propia persona, además de temor al mundo real.
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Problema delicado. Utilizando los casi inagotables recursos de las redes sociales, muchas personas dedican tiempo a perseguir y hostigar a sus víctimas hasta llegar al ensañamiento. Esta conducta sería reflejo de un trastorno de la personalidad.
Elvis Vizcarra Flores.
Arequipa.
Registrarse e ingresar a una red social hoy es casi tan peligroso como salir solo por una calle oscura a medianoche, donde uno nunca sabe con quién puede toparse.Uno de los riesgos más comunes es caer víctima de acoso cibernético o "stalking"
Traducido literalmente, este término acuñado en Internet recientemente, significa "acecho". Sin embargo tiene una estrecha relación con alteraciones en las capacidades para relacionarse de las personas, incluso llegando a colindar con diversos y patológicos trastornos de la personalidad.
Este comportamiento consiste en la persecución sistemática y persistente a una persona. La integridad física y psíquica de la víctima inmediatamente se ve amenazada y afectada. Una de sus principales características es el constante contacto no deseado (por ejemplo, a través de cartas, llamadas telefónicas, correos electrónicos, mensajes de texto por celular o redes sociales).
Para el psicólogo del Programa contra la Violencia Familiar y Sexual del Ministerio de la Mujer, Omar Beltrán Jibaja, los acosadores o "stalkers" reciben satisfacciones eróticas producto de sus conductas. "Este también es un problema de baja autoestima y de valoración de la propia persona. El acosado no se acepta y tiene temor de relacionarse en el mundo real", indica.
Señaló además que muchas víctimas continúan soportando estos comportamientos debido a diversos factores, como por ejemplo no hacerlos públicos ante las personas, aunque la solución sería justamente lo contrario: denunciar a los agresores de forma directa.
 "He tenido un caso de una jovencita que no denunció este problema por temor a ser descubierta por su enamorado. Ella terminó siendo abusada sexualmente por su acosador, quien averiguó su dirección mediante las mismas redes", dijo.
 
SITUACIÓN MUY COMÚN
Un "stalker" también dedica su tiempo a husmear en la vida privada de  alguien en particular, buscando información personal con la finalidad de crear una relación sentimental, casi siempre ficticia, entre él y su potencial víctima.
En nuestro país, alrededor del 30% de denuncias por acoso están vinculadas al uso de tecnologías, sin embargo aún no están tipificadas en el Código Penal, y en consecuencia no tienen sanción.
En Arequipa, según el jefe del Departamento de Investigación Criminal (Depincri), comandante PNP Berly Alarcón López, solamente se han registrado dos denuncias de acoso en los últimos años. En su opinión, esto se debe a que es difícil reunir las pruebas suficientes para probarlo o entablar una denuncia. Sin embargo, ninguna de estas denuncias estaba relacionada con medios digitales.
"Las denuncias por este tipo de falta pueden ser puestas en cualquier comisaría. Servirían para pedir garantías ante el agresor", indicó.
 
ARMA DE DOBLE FILO
Para el decano de la Facultad de Ingeniería y Computación de la Universidad Católica San Pablo, PhD Ernesto Cuadros Vargas, la tecnología es un arma de doble filo, pues dependiendo de quién la utilice, puede ser benigna o perjudicial. "En las redes sociales no puedes confiarte de nadie, por que es muy sencillo crear identidades falsas", apuntó.
Por ello, la próxima vez que vea o identifique a alguna persona que monitorea constantemente su actividad en la red, si habla de usted como si tuviesen una relación importante, si le manda correos o mensajes de forma insistente, recuerde que puede ser víctima de "stalking".
EN CIFRAS
19,000 peruanos se estima que sufren de acoso cibernético según Centro Nacional para Víctimas del Crímen.
de cada 20 mujeres en algún momento de su vida sufrió de acoso.
1980 es la década en la que comenzó el "stalking" y estaba relacionado a celebridades.
FUENTE: DÍARIO LA REPÚBLICA